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Existe una única cosa que el universo tiene en común y es la energía. Todo lo que conocemos y no conocemos en el universo es energía, puesto que todo está compuesto por átomos quienes están formados por energía. La energía juega un papel tan importante en todos los aspectos de nuestras vidas, de los cuales sobresale uno de ellos y es la relación que tiene con el desarrollo económico que ha tenido la humanidad desde la revolución industrial.
Las fuentes de energía que hay en la tierra, se pueden catalogar en dos grandes grupos: energías renovables y energías no renovables. Las fuentes de energía no renovables, como el carbón, petróleo y gas natural, permitieron que en el siglo XVIII se diera paso a la revolución industrial; gracias a la invención la máquina de vapor se fue abriendo el camino a muchos descubrimientos que cambiaron las condiciones de vida de la humanidad para siempre.
Las antorchas que antes se utilizaban para iluminar fueron remplazadas por los bombillos, los coches impulsados por caballos fueron reemplazados por los carros y trenes, y muchas otras cosas más fueron cambiando a medida que se utilizaba la maquina de vapor para reemplazar a los humanos y las maquinas manuales, al ofrecer mejores eficiencias y mayor velocidad de producción.
Es a partir de esta época que empezamos a obtener energía a partir de las fuentes de energía no renovables, y con el tiempo, se volvió una herramienta fundamental para impulsar el desarrollo económico de los países. La quema de combustibles fósiles nos permitió estar en la capacidad de suplir nuestros hogares con electricidad, calefacción y medios para la cocción de nuestros alimentos; además, también nos permitió impulsar automóviles, aviones, trenes, fabricas y muchas otras cosas más que hacen parte de nuestra cotidianidad.
Jeffrey Sachs en su libro La era del desarrollo sostenible hace una evaluación muy interesante del porqué muchos países tuvieron un crecimiento económico lento, mientras que otros los tuvieron de manera acelerada, y encontró que los países que tuvieron mayor facilidad de acceso al carbón y posteriormente al petróleo durante la revolución industrial, fueron aquellos cuyo desarrollo se dio de manera acelerada, mientras que por el otro lado, aquellos países que debían importar estos combustibles fósiles, les fue más difícil seguir la misma senda a tal nivel, que aún hoy en día se encuentran en vía de desarrollo.
De acuerdo con el Banco Mundial, existe una relación estrecha entre el consumo de energía eléctrica y el producto interno bruto (PIB). Está demostrado que hoy en día los países más pobres tienen un acceso a la energía eléctrica limitado a diferencia de los países ricos e industrializados, donde los ingresos per cápita son muy altos y esto se refleja en su demanda de energía. En la imagen a continuación, se puede observar de manera clara la relación que existe entre el PIB y el consumo de energía eléctrica.
Imagen tomada de https://ourworldindata.org/energy-access
Es una realidad de que cada vez se depende más y más de la energía para continuar el desarrollo económico de las regiones, razón por la cual se deben buscar diferentes alternativas para que las personas que se encuentran en zonas no interconectadas tengan acceso a esta. El problema radica en el hecho de que los combustibles fósiles han sido los responsables de desencadenar el cambio climático, razón por la cual se deben buscar alternativas a partir de fuentes de energía renovables para lograr esta meta.
Es precisamente que por esta razón, en 2015 las Naciones Unidas definieron los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), donde se fijaron 17 metas que abarcan los problemas más complejos a los que se enfrenta la humanidad en este momento, y se encaminan en aras de promover el desarrollo sostenible de los países que aún se encuentran en proceso de desarrollo.
Esta situación ha generado gran controversia, puesto que sería un poco injusto con estos países que se les limitara su crecimiento económico por el hecho de que deben utilizar energías renovables en vez de los combustibles fósiles, como lo hicieron los países industrializadas durante mucho tiempo y cuyo consumo sin control, tiene como consecuencia el cambio climático que nos afecta a todos hoy en día.
Como puedes ver, la energía tiene una estrecha relación con nuestras vidas y se ha vuelto algo inprescindible para todos, razón por la cual se ha convertido en una necesidad básica para las personas, ya que brinda los medios para realizar diferentes actividades que les permite mejorar sus condiciones de vida y las de sus familias. Lo que debemos promover como sociedad, es la implementación de fuentes de energía renovable como la energía solar o eólica, para que ninguna persona sea privada de tener acceso a la energía, y de esta manera pueda mejorar su calidad de vida y tener acceso a diferentes “lujos” de una manera sostenible.
Si deseas aprender más sobre energía y como conservarla, déjame un comentario o envíame un mensaje. De igual manera aquí en Energía y Sostenibilidad encontrarás más artículos relacionados.
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Sobre Javier Areniz Flechas
Mi nombre es Javier Areniz y soy el autor/creador de ENERGÍA Y SOSTENIBILIDAD. Debido a mi experiencia personal y profesional, he aprendido la importancia de llevar una vida más sostenible, que permita contribuir a reducir los efectos e impactos generados por el cambio climático.